—¿Qué me motiva a realizar estas campañas?
En el año 2015 hice un posgrado en Pediatría Rural Social y Comunitaria en un ONG de Rosario (La Higuera) y el trabajo de campo es en el Impenetrable Chaqueño. Allí conocí ese lugar remoto y a su gente.
Es gente olvidada con muchas necesidades básicas insatisfechas, la más importante es el agua. No cuentan con este vital elemento y dependen de las lluvias, que son muy escasas sobre todo en estos tiempos de sequía. Electricidad solo en el paraje y saliendo no hay.
Las personas de los pueblos originarios viven en condiciones infrahumanas.
—¿Cómo responde la gente?
Con mucha alegría, sobre todo los niños cuando le llevo juguetes y golosinas
—¿Cómo responden los beneficiados por las donaciones?
Responden con mucha alegría y agradecimiento. Son muchas las necesidades. Para ellos la ropa, el calzado, los alimentos, el agua, los juguetes, golosinas, bicicletas, máquinas de coser, etc.
Es gente olvidada con muchas necesidades básicas insatisfechas, la más importante es el agua.
